El final que muchos pensaban que no llegaría

Hace cuatro años en el E3 2015, en concreto durante la conferencia de PlayStation, nos llenaron con un sin fin de anuncios interesantes para los fanáticos. Pero algo que en verdad no veíamos venir es la salida de Yu Suzuki al escenario para presentar Shenmue III, el juego que daría cierre a lo que se inició en 1999.

Hay que decir que todo empezó como una campaña de Kickstarter en esa misma presentación, pero a la par una parte del juego tuvo una especie de financiamiento por parte de Sony. Lo bueno de esto, es que los fans de corazón lograron conseguir lo impensable y en cuestión de días se llegó a la meta.

A pesar de este logro, el juego tuvo algunos retrasos y hasta cambio de desarrolladora, la cual es YS Net, pasando a ser una propiedad ajena a SEGA. Aunque lo importante aquí, es que su creador se mantuvo para continuar la serie que tanto nos motivó en el Dreamcast.

Los años pasaron y el título al fin ha llegado tanto a PC como a PS4, así que es momento de responder a las siguientes incógnitas: ¿Será que la espera habrá valido la pena? ¿Shenmue es una saga que puede ser adaptada hoy en día? Pues bien, hay que averiguarlo mediante la reseña que tengo para ustedes el día de hoy.

Una historia de mafia y venganza

La historia de Shemue III es una continuación inmediata de sus antecesores, en donde encontramos al protagonista Ryo Hazuki, un joven que fue entrenado en las artes marciales por su propio padre. Este fue asesinado por la mafia de Japón, por lo que Ryo se aventura en tierras niponas para encontrar al asesino y cobrar venganza.

Por azares del destino, se hace con un artefacto llamado el Espejo del Fénix, mismo que le revela su futuro lleno de peligrosos combates. Es así como se entera del mafioso responsable de la pérdida de su progenitor. Ahora, nuestro héroe tiene que partir hacia Hong Kong en su búsqueda.

Una vez en China, conoce a una joven llamada Shenhua, la cual le guiará en su aventura por este país desconocido, pero a cambio, tendrá que ayudarla a encontrar a su padre, el cual fue secuestrado por unos matones desconocidos para ella.

Justo en esta última parte es donde inicia la tercera aventura y como podrás ver, es una historia que tiene en su mayoría misterio y drama, así que tendrás que estar listo para vivir toda clase de emociones. Todo para cerrar un ciclo que ya debía ser resuelto.

¿De qué va Shenmue III?

Algo que hay que dejar en claro el género de este videojuego, pues es una especie de híbrido entre un mundo abierto, simulador de vida, mini juegos y obvio, acción con toques de arcade y pelea. Podrá sonar algo complejo, pero es todo lo contrario, pues todos estos subgéneros compaginan muy bien entre ellos.

El título tiene ciclos de día y noche como todo buen simulador, pues tendremos desde una hora en la que despertar, hasta el momento en que nuestro personaje necesite tomar sus horas de sueños. Cabe añadir, que el tiempo corre de manera decente, por lo que los días no se nos van a ir en un par de minutos.

En este transcurrir de los días, podremos realizar diferentes actividades como pescar, juegos de azar, trabajar, comprar objetos y hacer intercambio de estos mismos. Estas acciones son muy divertidas, ya que así la jugabilidad no solo se limita a la historia, la cual es un poco lenta en avanzar. Además pasar un momento en los mini juegos es bastante placentero.

Hay que enfatizar, que el inicio del juego puede resultar un poco lento, dado que habrá lugares limitados para explorar, por lo que los jugadores nuevos no les puede agradar la idea de no ir libres por el mapa. Pero hay que tomar en cuenta que nos tienen que explicar todo paso a paso, para así dominar todas las actividades al pie de la letra.

El combate tiene toques clásicos

Las peleas de Shenmue III pueden considerarse uno de los apartados más importantes del juego, ya que en casi todos los eventos importantes a resolver habrá un combate implicado. Es por eso que tienes que poner atención en las secciones de entrenamiento, esto para dominar los combos y técnicas.

Los enfrentamientos no serán un paseo en el parque, por lo que aumentar la fuerza y vitalidad de Ryo es imperativo y para lograr el aumento de nivel hay que entrenar constantemente. Esto quiere decir, que no podrás pasar la historia todo de corrido, a menos que tu habilidad sea innata y que los enemigos ni siquiera te toquen.

Debo añadir, que para conseguir distintos movimientos hay que hacer intercambios en las tiendas, pues se te otorgarán pergaminos que te darán la nueva habilidad en cuestión. Así que trata de juntar colecciones de objetos como lo pueden ser figuras o anzuelos de pesca, esto te hará más fácil la tarea de conseguir todas las técnicas.

Esta manera de progresar podría aburrir a los más jóvenes, pues si bien los controles son algo intuitivos, pueden llegar a sentirse algo primitivos para la época. Siendo sincero, hubiera sido una mejor decisión poner un estilo clásico, así como uno simplificado para los novatos.

Para terminar este apartado, debo mencionar que me pareció divertido memorizar los combos y esa será la clave para las peleas. Entonces si te gustan los hack and slash, déjame adelantarte que por lo menos en Shenmue III vas a tener que echarle un poco más de coco o de lo contrario perderás un par de veces.

Gráficos que se sienten extraños

Respecto a la parte gráfica, este juego es un arma de dos filos, ya que los escenarios, pequeños paisajes, casas, ciudades, ríos, bosques y hasta campos de flores lucen excelentes gracias al Unreal Engine 4. En verdad, los detalles son bastante aceptables, por lo que podrás creer que es una copia exacta de China.

Además, los detalles dentro de las casas parecen calcas de viviendas reales, estas cuentan con sus muebles, cocinas con sus respectivos ingredientes, baños y habitaciones que te harán sentir en casa. En toda la extensión de la frase, sí es un simulador de vida realista.

Pero no todo es color de rosa, y es aquí donde pasamos a los personajes, pues lucen un poco extraños. Nuestros héroes Ryo y Shenhua parecen no tener emociones algunas, dado que en sus facciones pareciera que le están hablando a la pared en los diferentes diálogos; esto es algo que ya se cuestionaba desde los primeros tráilers y al parecer solo se hicieron mejoras mínimas.

En cuánto a los NPC, estos se distancian bastante de los personajes principales, dado que sí cuentan con emociones y no parecen un avatar carente de alma. Pero también tienen algunos errores, entre los que destaco las sonrisas exageradas que en ocasiones hasta pueden dar un poco de escalofríos.

Sonido que te pone en el ambiente

En el apartado de sonido de Shenmue III encontramos buenos detalles, y es que la música conserva todo lo que hizo de culto a la franquicia. Aquí las composiciones asiáticas predominan, y nos van a transportar a ese Hong Kong de la época ochentera que no tiene que envidiar a otras eras.

De igual manera, algunos de los temas principales de la saga regresan con unos retoques que le darán un vuelco al corazón a los fanáticos, más a los que llegaron a experimentar los juegos en sus consolas nativas.

Pasando a los doblajes, estos están en disponibles en japonés e inglés, y hay que comentar que son una maravilla, sobre todo en el primero. Pareciera que estamos jugando una película en live action gracias a estas actuaciones de voz, pero lamentablemente no lucen todo su potencial debido a la carencia de expresiones.

En cuanto a los efectos sonoros, estos son bastante realistas, desde el sonido de las pisadas, las puertas, agua corriendo y hasta las aves son muy convincentes. Esto hace que se acompañen muy bien de la música; con esto quiero decir, que en la sonoridad, el juego no queda a deber.

Un título que no siente de estos tiempos

En conclusión, Shenmue III es un simulador de vida bastante completo, tiene mini juegos, misiones principales, secundarias y de investigación que mantendrán a los jugadores entretenidos por horas. Aunque, si se busca acción por todos lados, es algo que desgraciadamente no puede ofrecer.

Como ya había mencionado, sus controles se podrían sentir un poco complejos para los usuarios nuevos, e inclusive algo arcaicos. Y definitivamente, si fue un ligero fallo el no añadir una opción para que las personas nuevas en la saga se pudieran adaptar a la misma.

¿Llegarán nuevas entregas?

Este juego es un bonito viaje que va a entretener de principio a fin a su legión de fans, pero no arriesga tanto como para sumar algunos más a sus filas de seguidores. Probablemente no va a destacar de entre otros títulos de 2019, pero los más nostálgicos apreciarán el gesto de Yu Suzuki por terminar esta intrigante historia.

Realmente se siente como un juego de la primera década de los 2000, y digamos que no es algo del todo malo, pero hay personas que esperaban recibir algo más innovador. Espero que a futuro podamos  tener una aventura más de Ryo Hazuki, pero esta vez con mecánicas que vayan dirigidas  a todo público.

Se reseñó en PS4. También está disponible en PC.