Microsoft pretende que la transición entre Xbox One y Xbox Series X sea lo más suave posible, y no habrá cambios en un lapso de uno o dos años

Microsoft tiene planeado que su nueva consola, el Xbox Series X, se estrene en el transcurso de este año. Podría pensarse que para apoyar su lanzamiento, éste estará acompañado de varios juegos exclusivos.

Pero en realidad no será así, o al menos, eso es lo que dio a entender recientemente la compañía. Eso fue a través de uno de sus más conocidos voceros, Matt Booty, jefe de la división de Xbox Game Studios.

Xbox Series X no cambiará todo de golpe

En una entrevista comentó “a medida que salga nuestro contenido durante el próximo año, o los dos siguientes, todos nuestros juegos, más o menos como PC, se jugarán arriba y abajo en esa familia de dispositivos”.

Esto fue interpretado en el sentido de que los juegos que salgan para el Xbox Series X serán jugables tanto en este como en las actuales consolas de la compañía. Es peculiar que se haya decidido obrar de dicha manera.

Además de retrocompatibilidad, Xbox Series X correría juegos de PC

Booty también dijo “queremos asegurarnos de que si alguien invierte en Xbox entre ahora y [las Series X], sienta que hizo una buena compra y que estamos comprometidos con el contenido”.

Algunos creen que esta idea es para lograr que la transición entre una consola y otra sea lo más suave posible. Es un concepto que bien llevado podría funcionar, ya que Microsoft retendría, al menos por un tiempo, su base actual.

Microsoft quiere hacer una transición suave

Eso mientras logra conseguir una nueva a través de la Xbox Series X. Se supone que uno de los primeros juegos que podrán jugarse tanto en este sistema como Xbox One, Xbox One S y Xbox One X será Halo Infinite.

Es un misterio que otros títulos tiene planeados Microsoft para que funcionen de dicha manera. Pero lo que si es seguro es que estamos hablando de un plazo que puede ir de uno hasta dos años.

Eso si tomamos al pie de la letra las declaraciones de parte de Matt Booty. El caso es que si actualmente tienes un Xbox One o alguno de sus modelos, será mejor que lo conserves.

Pero debes hacerte a la idea de que algún día será necesario sustituirlo por su sucesor. Pero al menos tendrás el tiempo suficiente como para poder hacer el cambio de consola cuando lo desees.

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