En la Sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli, podrás ver El viaje de Chihiro con música de piano por única ocasión.

Fue el 20 de julio del 2001 que se estrenó una de las mejores películas producidas por la reconocida casa de animación japonesa. ¿A cuál nos referimos? Pues a El viaje de Chihiro, o como se le conoce en Japón, Sen to Chihiro no kamikakushi. Este 22 de julio se conmemorarán 17 años de su estreno en el país del Sol Naciente, y es algo que merece celebrarse.

Es por lo mismo que el 20 de julio se llevará a cabo un evento especial de una de las máximas obras del director Hayao Miyazaki. En la Sala Silvestre Revueltas de la Ciudad de México se exhibirá esta película, pero acompañada de música de piano. Todo gracias a la adaptación del maestro pianista Alejandro Olivares, tomando como base la partitura de Joe Hisashi.

El viaje de Chihiro como nunca lo escuchaste

La función, que lleva por nombre El viaje de Chihiro y Piano – XV Aniversario, comprenderá una única función. Ésta se llevará a cabo el 22 de julio de este año, a partir de las 13:00 hrs. Como era de esperarse, este filme animado se transmitirá en su idioma original con subtítulos en español. Tiene una duración de 2:05 horas, y las puertas estarán abiertas a partir de las 12:00 hrs.

Los boletos ya están disponibles a la venta. La entrada general en preventa costará $250 pesos, pero el mismo día de la proyección subirá a $350 pesos. Así que si de verdad quieren asistir, lo mejor que pueden hacer es reservar sus boletos y apartar sus lugares. En caso de que quieran hacerlo en línea, lo mejor que pueden hacer es acudir a Boletia.

Una experiencia que se vuelve mágica

Ahora, que si les queda cerca este lugar, pueden acudir los sábados de 16 a 19:30 hrs., y los domingos de 11 a 14:30 hrs. La dirección es Centro Cultural Ollin Yoliztli, en Anillo Periférico Sur 5141, Isidro Fabela, 14030, en la Delegación Tlalpan de la Ciudad de México. De verdad que si tienen la oportunidad sería bueno que asistieran.

El viaje de Chihiro es una maravillosa película, pero tener la oportunidad de escuchar su música en vivo es una experiencia por demás singular. Agrega un sentimiento especial y único a uno de los filmes animados de origen japonés más queridos. Ojalá esto mismo vuelva a repetirse en unos años, cuando se cumpla su vigésimo aniversario.